JC Pajares homenajea la artesanía tradicional a través de la historia de cada una de las piezas de su desfile más especial hasta el momento en la MBFW 2022.

Redacción: reflejos de moda @reflejosdemoda

El desfile de JC Pajares fue un viaje en el tiempo. Ilusión, era el reflejo de nuestras caras cada viernes cuando recorríamos el pasillo rápidamente. Comenzábamos las clases un día más, pero ese era especial. Llegábamos al taller, llenos de imaginación, a plasmar piezas únicas con nuestras propias manos. Recuerdo cómo desde tan pequeña me enseñaron a diseñar con dedicación y paciencia el que fue mi primer collar de arcilla. Era una estrella, imperfecta a la vista de cualquiera, pero con un significado inexplicable.

Es todo un privilegio crecer conociendo la importancia de la artesanía, la entrega que se le pone a cada pieza y la pasión vehemente de todas y cada una de las personas que tienen por oficio sus manos. Entender el valor del trabajo artesanal, y que, en la diferencia, prevalece la exclusividad. Crear piezas que por mucho que se intente jamás serán dos iguales.

Resulta imposible concebir el mundo sin ellos, sin cada uno de los artesanos que han dedicado su vida para que los demás podamos vivirla. Y esto mismo proyecta JCPajares en una colección que te transporta a lo tradicional de la mano de figuras maestras de Castilla La Mancha, la esencia y las protagonistas del especial desfile que nos regaló en la MBFW.

Juan Carlos Pajares conmemoró por todo lo alto el talento que hay detrás de prendas diseñadas mediante una de las mayores expresiones artísticas del hombre. Cerámicas, vidrios, bordados, mimbres y tejidos hechos en telares centenarios plasman la cultura y la historia de la región en cada una de las piezas de la tercera colección Annual 22.23 del diseñador.

Una puesta en escena en la pasarela de la Mercedes-Benz Fashion Week 2022 impecable. Patrones sensuales, sofisticados, que dan forma a prendas atemporales, oversize y con cut outs. Materializados a través de organzas, sedas, algodones, neoprenos, crepes y plumas. Un viaje cromático que da comienzo con los colores tierra, pasando por los más explosivos y eléctricos, hasta llegar al negro. Acompañado en todo momento por una orquesta que marcaba el ritmo de una colección donde todo tiene cabida.

Y es que, desde que dio comienzo logró convertirse en un desfile capaz de comunicar a través de cada una de sus prendas, de transmitir una moda consciente y sostenible, sin industrialización. Capaz de alzar y reivindicar técnicas únicas con siglos de historia. Un desfile que apuesta por un legado único, por artesanía en estado puro.